Dios es compasivo. Al usted leer este libro: Éxodo de Bendición, podrá darse cuenta de que Dios no se agrada del sufrimiento del hombre, ni de la mujer; tampoco del sufrimiento del joven, de la jovencita, o de la familia entera. Por el contrario, a Dios le duele ver que la humanidad sufre. El pueblo de Israel es el ejemplo, pues al ser tomado por esclavos en Egipto, por los egipcios, los cuales lo oprimían, los maltrataban, y también los menospreciaban; entonces cuando a Dios le dolió el sufrimiento de su pueblo Israel y decidió enviar un libertador para sacar de Egipto a su pueblo Israel de la esclavitud… Dios envió a Moisés y a su hermano Aron para libertar y sacar al pueblo de Dios del sufrimiento, de la opresión, y de la esclavitud.
De igual manera, Dios vio el sufrimiento del mundo entero esclavo de la violencia, del odio, la injusticia, orgullo y toda vanidad, produciendo en la humanidad mucha amargura, y toda clase mal. Todo eso atormenta a todo ser humano, lo oprime, lo cansa, y lo lleva a la destrucción. Todo eso miró Dios en el mundo, sufrió y envió a un libertador: a Jesús, el hijo del Dios viviente, para sacar a todo ser humano de todo ese mal… Jesús es nuestro libertador, nuestro salvador, nuestro proveedor. Él ha venido al mundo para salvar al mundo de la esclavitud de todo mal. Podrás tener paz, amor, libertad, y vida en abundancia.
Éxodo significa salir.
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